6 mar 2025
Empezar de nuevo nunca es fácil, pero hay historias que demuestran que hay cambios que son para mejor. Este es el caso de Alberto Díaz Blanco, un empresario que dejó atrás más de 15 años de dedicación a la hostelería para adentrarse en el sector de la movilidad, donde ha encontrado estabilidad y calidad de vida como propietario de flota. Su historia es un ejemplo de adaptación, esfuerzo y éxito.
Después de haber dedicado más de 15 años a la hostelería nocturna y diurna, y de regentar varios locales y par de restaurantes, la pandemia fue el punto de inflexión que llevó a Alberto a replantearse su futuro. Los altos niveles de estrés y la imprevisibilidad del sector le alentaron a buscar alternativas. Fue entonces cuando dio con el mundo de las VTC.
En octubre de 2022 traspasó sus restaurantes y, para noviembre de 2022, ya tenía su primera licencia VTC y se iniciaba como conductor autónomo colaborando únicamente con la plataforma Bolt. Decidió empezar como conductor para conocer el negocio de primera mano y familiarizarse con el sector. Dos años y medio después, gestiona seis licencias VTC y tiene trabajando en plantilla a 17 conductores. Ser propietario de flota le ha permitido encontrar la estabilidad y calidad de vida que buscaba.
Cuando preguntamos sobre desafíos y mejoras en el sector, comenta, por ejemplo, la escalada de precio de las licencias VTC y la dificultad a la hora de dar con conductores experimentados. Sin embargo, para esto último cuenta con un olfato especial que ha desarrollado con los años.
En cuanto al futuro del sector, Alberto es optimista, aunque le preocupa la incertidumbre legislativa. “El servicio de VTC ha encajado perfectamente en la sociedad. La gente valora saber qué coche llega, quién es el conductor y el precio exacto del viaje. Pero las decisiones políticas pueden cambiar las reglas del juego”, comenta. Aun así, está convencido de que el modelo de movilidad actual tiene un futuro prometedor, especialmente con iniciativas como la de la reducción de la tasa de alcoholemia, que fomentarán aún más el uso de VTC.
Para quienes estén pensando en adentrarse en este negocio, su consejo es claro: “Es un negocio exigente, pero bien llevado, es muy satisfactorio. Si la plantilla sale buena y la gente es responsable, prácticamente el negocio se lleva solo. Además, yo ya no me veo trabajando para otra persona”.
Asimismo, Alberto también tiene un consejo claro para mostrar fidelidad a la marca Bolt y que las cosas vayan mejor: “Hay un secreto general, que es hacer las cosas bien con Bolt. Es decir, cumplir con los requisitos y el planning del programa de Branding todas las semanas”.
La historia de Alberto Díaz Blanco es un ejemplo de cómo reinventarse profesionalmente puede traer estabilidad y calidad de vida. Su paso de la hostelería al sector de la movilidad no solo le ha permitido crecer y gestionar su propio negocio con éxito, sino también disfrutar de una rutina más equilibrada y organizar mejor su tiempo. Hoy, con una flota consolidada, colaborando con Bolt y con una estrategia clara , disfruta de la libertad y la tranquilidad que siempre buscó.
Además de gestionar su empresa satisfactoriamente, Alberto también tiene tiempo para otra de sus pasiones, la música, ya que toca el saxo y canta. Si algo ha aprendido en estos años, es que con esfuerzo, dedicación y el equipo adecuado, el éxito llega y, lo más importante, se disfruta.Recuerda que, si tienes una empresa de flotas, puedes colaborar como propietario de flota con Bolt y, si ya colaboras con nosotros, puedes potenciar tus ingresos uniéndote a nuestro programa de Branding.
